Villa Giardino: Seguridad Pública, materia pendiente del gobierno provincial

En los últimos días, el Jardín del Valle de Punilla se vio alterado en su tranquilidad por denuncias públicas sobre hechos delictivos. Al igual que en el resto de la provincia y en Punilla en particular, parece que la situación se va transformando en una materia sin resolver por las autoridades provinciales.

En los últimos días, el Jardín del Valle de Punilla se vio alterado en su tranquilidad por denuncias públicas sobre hechos delictivos.

Al igual que en el resto de la provincia y en Punilla en particular, parece que la situación se va transformando en una materia sin resolver por las autoridades provinciales.
Me refiero a las autoridades provinciales, dado que desde este estamento de gobierno, se fijan las políticas públicas de seguridad, se administran los medios disponibles, se controla a la policía, se previene y se reprime el delito.

Pero también es una realidad, que no se puede tomar la cuestión de seguridad pública como un hecho enfrascado en una localidad en particular. Mucho más cuando las localidades están apenas divididas por una calle.

Hay factores que influyen notablemente en la cuestión, es decir que conforman los principales puntos a tener en cuenta al momento de definir la situación actual.

En primer término se puede mencionar la segregación de la familia y la pérdida de valores, la situación socioeconómico, la desatención de los gobiernos provincial y nacional, falta de políticas públicas, deserción escolar y el crecimiento de consumo de drogas legales e ilegales.

Por último, se puede mencionar la situación policial y judicial. En fundamental saber si estas instituciones que conforman el “estado”, están a la altura de la circunstancias para enfrentar el flagelo que se va incrementando año tras año.

• Mientras los adultos mayores consideran que es el consumo de drogas la causa de la inseguridad, los más jóvenes se lo atribuyen a la falta de empleo.

Los incidentes cotidianos de delincuencia que experimentan muchas personas -como los robos y hurtos, los atracos y los robos con escalamiento- pueden considerarse un fenómeno en gran medida urbano, impulsado por factores locales. La planificación urbana, la prevención del delito y la acción policial parecen ser factores importantes para reducir el riesgo de ser víctima de esos delitos. Sin embargo, los delitos menores o convencionales pueden diferir considerablemente de un distrito a otro de una misma ciudad. La proximidad entre los delincuentes y sus víctimas, la vulnerabilidad de los objetivos de la delincuencia, la disponibilidad de armas de fuego y drogas, la presencia de bandas, la densidad de población y las presiones y tensiones que afectan a una determinada comunidad contribuyen a aumentar el riesgo de inseguridad y delincuencia.

Influye la situación social y la droga en la inseguridad?

En lo que respecta al tráfico y consumo de drogas y a la violencia asociada a ellos, es de señalar que en la Argentina ha ocurrido un notable aumento. Así, se habría consolidado un gran mercado interno, que contaría con sus propias redes de distribución y tráfico local. Por ejemplo, la droga incautada entre 1990 y el 2008 en el caso de la Marihuana pasó de 0,7 tonelada a 100 t, y en el caso de la cocaína pasó de 1 a 7 t.

Mientras que el consumo de drogas por estudiantes secundarios, entre el 2001 y el 2007, de cocaína creció del 1% 2,2%, de paco del 0,5% al 1,4%, y de éxtasis del 0,2% al 2,2%. Posiblemente relacionado con este fenómeno, el suicido de jóvenes se ha duplicado.

Los delitos registrados por los organismos de represión pueden estar relacionados con las drogas de forma directa o indirecta. Una proporción de los delitos tales como el robo, el hurto, el atraco y el robo con escalamiento obedece a factores subyacentes tales como el consumo de drogas. Sin embargo, desde el punto de vista estadístico, la medida en que el consumo de drogas es responsable de esos delitos no es fácil de determinar, y rara vez forma parte de los informes oficiales.

En agosto del 2009, en el caso “Arriola”, la Corte declaró la inconstitucionalidad de la penalización del consumo de drogas, primero por cuestiones de principio es decir por considerar que conculcaba la libertad de las personas, pero también por cuestiones de índole fáctica o de evaluación de políticas, ya que argumentaban que la penalización no había servido.
Más Info